Oración por protección, Antes de salir de casa, durante el día o antes de algún evento importante, solemos hacer mantener una conversación con Dios. Esto nos permite mantener la tranquilidad y la paz que necesitamos para enfrentar cualquier vicisitud. Existen muchas oraciones para protección aquí algunas de ellas:

Oración de protección

Señor, mi Dios todopoderoso, misericordioso y omnipotente,

Señor, tú que eres el principio y fin de todas las cosas,

acude aquí a mi auxilio y protección.

Magnífico de los cielos, eres el más grande

y por la intercesión a través de tus hermosos ángeles,

te rogamos humildemente que nos libres de todo mal y peligro.

Regálame una armadura brillante para repeler cualquier mal

y permíteme gozar siempre de la paz.

Acudo a ti, para que me auxilies y me socorras,

cúbreme con tus brazos poderosos, libra mi mente, cuerpo y corazón

de cualquier mala influencia que me perjudique.

Señor, permite que a través de ti, María pueda obrar en mí,

para que pueda aprender de ella, de su misericordia y su perdón,

así podré dispensar a mis enemigos y protegerme de las malas influencias.

Mi Dios todopoderoso, creo en ti, en tu gran poder, en tu palabra y tu Gloria,

porque es la única que puede indicarme el camino.

Perdona todos mis pecados,

y a través de tu poder, del poder de tu sangre y tu magnanimidad

permíteme redimirme.

Aparta de mi todo aquello que me atormenta y me hiere,

aleja de mi hogar todas las sombras tenebrosas,

sálvame de todo aquello que me quiera dañar o perjudicar,

destruye las cadenas que me anclan para poder trabajar

para hacer tu voluntad.

Padre maravilloso y bueno, permíteme portar tu armadura,

esa que me puede ayudar a enfrentarme al poder de Satanás

y en nombre de Jesús poder vencer sus malas influencias.

Con tu poder, puedo asumir mi verdad y combatir la mentira del enemigo,

Protejo mi corazón de la maldad que me acecha.

Seré testimonio y multiplicador de la verdad del Evangelio de la paz,

Solo me aferro a las cosas materiales que me permiten vivir con comodidad

pero renuncio a lo superfluo para honrarte con mi humildad.

La fe es mi escudo, ese que ataja cualquier flecha envenenada,

que cierra el camino a las dudas y protege mi mente

de cualquier mal pensamiento y desesperanza.

Como cualquier soldado de Dios, empuño mi espada

para cortar toda esclavitud y vencer al demonio.

Mi armadura es la oración al Espíritu Santo,

por eso puedo controlar cualquier mala influencia

que pueda dañar mi mente y mi espíritu.

Oh! Mi señor misericordioso

Permite que San Miguel Arcángel permanezca conmigo,

porque él es quien puede luchar contra la perversidad,

gracias a que tú manifiestas a través de él, el gran poder

que tienes para luchar contra las acechanzas del demonio.

Pido al príncipe de los ejércitos de Dios, que eche de mi vida

todo resquicio de maldad, a todos los espíritus malignos

que me rodean a mí y a mi familia.

Santo inmortal, ten misericordia y ayúdame a estar seguro

en cada uno de mis pasos.

Mi señor, pido tu permiso también para invocar a Jesús,

tu hijo sacrificado, de quien debo seguir el ejemplo,

del gran amor demostrado por su amado padre,

cuando derramó su sangre por todos nosotros.

Jesús, a quien acudo porque se del poder para combatir

las ataduras y perturbaciones.

Por eso, agradezco a mi Señor Jesús,

por su cuidado y protección,

por darme paz y reposo en todos los aspectos de nuestra vida.

Santo Jesús, te abro mi corazón para recibir tu palabra sabia,

para sentir en mi interior tu divina misericordia

y que me pueda trasformar hacia una nueva vida

a través de tu luz bendita.

Escucha mis plegarias en mis momentos de angustia y desesperación,

me entrego a ti para ser multiplicador de tu divina palabra,

te pido que decidas lo mejor para mi

y sé mi guía en todo mi camino.

Estoy dispuesto a entregarte mi amor y agradecimiento

en esta y en la otra vida.

Pido también a mi madre María,

Oh! Gran Madre de Jesús, reina de los cielos,

cúbreme con el manto protector,

entra en mi corazón y bríndame desasosiego

dame las herramientas que necesito para cuidar a mi familia.

Eres la guerrera poderosa de los cielos,

la que lucha contra el mal ara proteger a sus hijos,

una guerrera de oración, con los que atacas a los espíritus malignos.

Ven a mí, bendita madre,

Poderosa madre del universo, acompáñame en cada paso que doy,

protege mi espalda de cualquier maleficio.

Reina de los cielos, si ves que me atacan y me agobian,

actúa contra el enemigo, protégeme también de caer en pecado,

por la influencia insidiosa del enemigo.

Virgen María pura y bendita,

ven a mi hogar e instálate en cada rincón,

cúbrelo con tu manto de bendición

y rodéalo con el Santo Rosario poderoso.

Tú que ves a quienes me quieren dañar,

interfiere en estas acciones,

bloquea con tus manos la entrada del mal,

Oh! Inmaculada madre hermosa,

Confío tanto en tu amor y tu poder, que me cobijo en ti,

me acurruco en tu pecho y espero que tus manos me consuelen.

Quédate conmigo, gran intercesora,

hasta que llegue mi momento de ir al encuentro con Dios,

Madre infinita, verbo de amor,

junto con Dios padre y tu hijo misericordioso

protégeme de cualquier mal que me acecha.

Amén.