Cada vez es mas difícil conseguir trabajo, y mas aún un trabajo honrado, pero siempre se puede pedir a los cielos por ayuda y estos siempre escucharán. Pide de buena fe a San Gabriel y pronto conseguirás un trabajo honrado.

Solemne acrangel San Gabriel, tú que nos vigilas desde las alturas y sabes por lo que pasamos, tú que conoces nuestras penas y has visto nuestros momentos difíciles, a ti te pido de buena fe que me ayudes en este momento aciago, pues tú conoces la dificultad de mi situación, y tú sabes lo difícil que es conseguir trabajo en estos tiempos, donde el desempleo abunda y las necesidades crecen.

Tú sabes que tengo aptitudes y que me puedo desempeñar bien, y sabes que si no tengo trabajo no es por falta de intentos ni por desinterés, pues mucho lo he intentado y no lo he conseguido. Por eso acudo a ti en busca de ayuda, para que me muestres hacia dónde tengo que ir para conseguirlo, y para que guíes mis pasos, mi acciones y mis palabras para hacer y decir lo correcto.

Te suplico, misericordioso San Gabriel, que me prestes tu gloria un momento para conseguir un buen trabajo, uno que me ayude a mantenerme y a los que dependen de mí, pues sabes que lo necesito y que tengo gastos que no podré seguir pagando. Y te prometo, maravilloso San Gabriel, que yo también sabré ayudar a los necesitados, y que siempre que esté dentro de mi posibilidad sabré extender mis beneficios hacia quienes vea que también necesitan una ayuda. Porque ganas no me faltan de ayudar a los demas, aunque en estos momentos no pueda hacerlo.

Por eso te pido, sabio acrangel que nos protege y nos guía, que escuches mi llamada de ayuda y desciendas un momentos de los cielos para ayudar a uno de los hijos del Señor. Sé que somos muchos los que necesitamos de tu misericordía, y por todos te suplico lo mismo. Pero también sabrás que ayudando a uno estarás ayudando a otros. Ayúdame y yo sabré ayudar a los demas, porque yo también conozco la bondad y el servilismo, aunque no haya tenido los recursos necesarios para demostrarlo en cantidad.

Por favor, Glorioso San Gabriel, dame fuerzas y entereza y consígueme un puesto honorable, que yo sabré mantenerlo y respetarlo mientras me queden fuerzas. Así sea.

Continúa rezando esta oración a San Gabriel, que él seguirá trabajando para otorgarte un trabajo digno, y mientras mas lo pidas y con mayor fe y confianza, mas claras le llegaran tus palabras.