Oración de agradecimiento y bendición los días domingos

Para la oración de todos los domingos, debes agradecer y alabar al Señor por todos los dones y gracias que te ha concedido, ya que esto siempre es bueno a sus ojos, así podrás seguir recibiendo todas las dadivas que Jesús tiene reservadas para ti, como el hijo amoroso y fiel que eres.

Cristo Jesús, tu eres nuestra guía, nuestra esperanza, nuestra vida y nuestro termino, te damos gracias por todas las ofrendas y obsequios que nos has dado a lo largo de nuestra vida, indiscutiblemente eres la luz que ilumina nuestros caminos, por eso te pedimos que no nos desampares y que siempre nos tengas bajo tu manto.

Te pedimos que sobre nuestra familia, sobre nuestra Iglesia y sobre nuestro hogar, no se cierna otra luz que no sea la tuya, que la luz del mundo, la luz de la verdad absoluta, la luz del amor, la luz de la unión entre hermanos, la luz de la espiritualidad, la luz de la Gracia Divina, la luz del Espíritu Santo.

Que nuestros oídos no escuchen otra verdad sino la tuya, Señor Único Jesús, que no tengamos ninguna otra aspiración que la de ser fieles a ti, que ningún otro consuelo nos sostenga, si no es aquel que por medio de tu palabra reconforte nuestra alma y sea un bálsamo para nuestra debilidad.

Te alabamos y te agradecemos todo el amor que derramas sobre nosotros, gracias por hacernos mas fuertes cada día, viviendo siempre en la gloria de tu amor y protección de todo peligro que quiera acecharnos, cobijándonos bajo la sombra de tu manto.

Devélanos los planes que tienes para nosotros, háblanos siempre Señor, para que podamos hacer tu voluntad y guiarnos por tus palabras, siendo ejemplo para los demas con nuestras acciones que muestren lo bueno que eres y todas las gracias que tienes preparadas para nosotros aquí en la tierra.

Todo nuestro ser es tuyo señor, haz de nosotros lo que quieras, conviértenos en la perfecta imagen de tu amor, siempre bajo tu guía y protección, te lo pedimos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.

Reza esta oración todos los domingos, puedes hacerlo en soledad o en compañía de tus seres queridos para que todos se empapen del Espíritu Santo para que tengan un día de descanso sagrado y empiecen la semana llenos de la palabra y de la presencia de nuestro Señor en todo momento.