Oración del 4to día de la novena para Casos imposibles y Desesperados, peticiónes muy difíciles a San Miguel Arcángel. A medida que nos acercamos a la mitad de la novena a San Miguel Arcángel, nos vamos adentrando mas en su presencia y su espíritu empieza a entrar en nuestro cuerpo, así comenzaremos a sentir su luz en nuestro ser. La oración del cuarto día debe ser rezada con alegría.
Adorado San Miguel Arcángel, estas cada vez mas presente en nuestros corazones y por eso sentimos tu presencia cada vez mas fuerte a nuestro lado, no queremos que te vayas, quédate con nosotros y cobíjanos de toda presencia maligna, mantennos bajo tu manto por siempre.
Solo tú puedes sanar nuestros cuerpos y nuestras almas, a través de tu poder sanador y por medio de tu intercesion con nuestra amada madre Maria, así estaremos mucho mas cerca de tener un cuerpo limpio de todo mal, gracias a ti. Solo con tu gracia alcanzaremos la gloria, para servirte siempre, amado San Miguel.
Monarca San Miguel Arcángel, en este cuarto día de tu novena, enaltecemos y reconocemos tu gran poder, con el que venciste al demonio, derrotando toda la maldad y oscuridad del mundo con tu valentía, por eso sabemos que solo tú puedes salvarnos de cualquier peligro que nos aceche.
Nosotros no somos tan valientes como tú, somos débiles y nuestros espíritus carecen de fuerza y espiritualidad. El mundo en que vivimos nos ha hecho incrédulos ante tu poder y el de nuestro Señor Jesucristo, por eso acudimos ante ti, de rodillas te imploramos que salves nuestra alma.
Queremos luchar nuestras batallas con la misma gracia que tú lo hiciste en tu lucha con el díablo, queremos tener tu fuerza, tu coraje y tu valor para enfrentarnos a las tentaciones y a las personas que quieran hacernos daño, para salir victoriosos como tú lo hiciste.
Concédenos el valor que tú tienes y representas, queremos enfrentar las inquietudes de nuestra vida díaria con gracia y valentía, que nada perturbe nuestros pensamientos, para que nuestras acciones sean para tu honra y para la honra de nuestro Padre Jesús y de nuestra madre Maria.
Solo con tu presencia en nuestra vida podremos ser mejores, no nos abandones a nuestra suerte, no permitas que nuestro espíritu se debilite, hazlo fuerte todos los días para que podamos vencer las adversidades y seamos personas de bien, como tú quieres que seamos.
Ponemos nuestras esperanzas en ti, querido San Miguel Arcángel, solo tú puedes hacer el milagro en nuestras vidas.
Amado San Miguel, tú siempre has velado por nuestro bienestar y siempre nos ayudas a arreglar todo lo que nos afecta, te agradecemos con todo nuestro corazón, tu compañía en nuestro camino, siempre queremos tener tu abrigo y protección, porque eres nuestro ángel, eres nuestra salvación.
No en vano luchaste por nosotros y nos defiendes de todo mal, por eso te damos gracias, gracias infinitas con toda nuestra alma, porque tú serás nuestro guardián y centinela por siempre, amen.
Para culminar la oración, se deben rezar nueve padres nuestros, nueve aves marías y nueve glorias, para la meditación de los santos.