Esta oración te libera de la hechiceria y la Brujería, para proteger de toda brujeria y hechiceria. La oración díaria y emitida con fe desde la sinceridad mas absoluta del corazón, es capaz de poner freno a cualquier mal que hayan emitido, sin importar su magnitud, porque la oración libera y no hay maldad que pueda contra la fe verdadera. Repite esta oración díariamente y libérate de todo daño.
Oración que te libera y protege de la hechiceria y la Brujería
Proclamo en nombre del Señor Jesús
Que por el bien se sacrificó y dio su vida en la cruz
Que me encuentro bajo su protección y me libera de todo daño
Me amparo bajo su poder para preservar intacto mi espíritu
Expulso todo demonio, así como las malas intenciones que pretendan perjudicarme.
Solo al Padre santísimo único y eterno reconozco como mi salvador y suya es mi vida
Por lo tanto, se encargará de protegerla y limpiarla ante cualquier acto de encantamiento,
Brujeria, amarre, hechiceria o magia negra que haya sido aplicado a mi persona
Con intenciones de seducirme o dañarme o que busque conducir mi rumbo por el camino de la amargura, la enfermedad, la escasez, la soledad, la debilidad de la carne o cualquier otro estado que me induzca hacia el mal.
Porque el bien ha sido mi norte y de la mano del padre, del hijo y del espíritu santo milito en el ejército de la luz que camina triunfante bajo el liderazgo sabio de San Miguel Arcángel,
Contra su espada poderosa no hay enemigo lo suficientemente fuerte,
Contra la firmeza de mi fe y la firmeza de mi espíritu no hay ente maligno con el vigor suficiente para doblegarlo, ni rendirlo, ni agotarlo.
En Dios me hallo, a él me entrego y con gozo confío plenamente en que él está obrando en mi
Que me dota de discernimiento, constancia, sabiduría y claridad para no alejarme del camino del bien, por permitir que ningún mal me perturbe y por mantenerme a mí y a mi familia bajo su impenetrable escudo de protección.
Padre amado, creador de todo lo bueno, tú que eres único refugio,
Tú que eres fuente de entereza y amparo de los mas débiles,
Me arrodillo ante ti y te suplico me liberes de cualquier atadura terrenal,
Aleja de mí las envidías y todas las fuentes del pecado,
Permíteme no ceder ante la influencia del brujo o del hechicero
Y demuéstrales lo insignificantes que son ante la magnificencia de tu poder,
Hazles conocer tu rigor justiciero,
Mientras yo continúo cosechando los frutos de la vida que con fervor te entrego,
Te proclamo dueño de mi vida y de mi voluntad
Te entrego mi confianza en que nunca habrá fuerte de mal capaz de vencerme porque tú tienes el timón de mi vida y solo tú decides su rumbo.
Envía muy lejos todo acto de brujeria, santería o hechiceria
Descarta de mis días toda fuente de negatividad
A través del poder y la convicción de Jesús de Nazareth destruyo a los enemigos visibles de la misma manera que a los enemigos ocultos
Dejo sin efecto toda fuerza maligna y expulso todo poder que no venga de Dios padre nuestro redentor y toda su corte celestial.
No hay mal que impida mi liberación
No hay mal que impida el desarrollo de mi vida con plenitud
Me declaro libre, limpio de alma y de espíritu y liberado de brujeria y hechiceria.
Con devoción clamo al cielo y proclamo tres veces
¡Me he liberado! ¡Me he liberado!
¡Me he liberado!
Porque creo en Dios fuente de paz, de amor y de liberación
A su lado estoy a salvo de todo peligro y pecado.